
Por estos días, Victoria Cisneros, educadora y agente pastoral del Colegio La Salle Buenos Aires, está cumpliendo tres meses como voluntaria en Tabatinga.
Se trata de una localidad en la triple frontera entre Brasil, Colombia y Perú, en el corazón de la extensa región amazónica. A través de la Región Latinoamericana Lasallista (RELAL) y la comunidad de Hermanos de La Salle, junto a otros religiosos y laicos consagrados, el carisma toma presencia y fortaleza a través de las diferentes vivencias realizadas, con el fin de beneficiar a la población de influencia.
Victoria, que se sumó con compromiso a esta experiencia sinodal para aprender, acompañar y aportar desde su mirada, envió un mensaje contándonos un poco sobre este tiempo. En él, señala que la isla Santa Rosa de Lima es el lugar principal de misión y que se fue convirtiendo en un hogar, en un refugio donde se comparte la vida. También nos cuenta cómo aprendió a vivir “según el ritmo del río”.
Por otro lado, saludó de forma particular a los equipos distritales de pastoral y a la comunidad de La Salle Buenos Aires, ¡a la que extraña mucho!
Le agradecemos y la felicitamos por este paso, que seguramente será enriquecedor, tanto a nivel personal como comunitario para todo el Distrito.









